(Un gran relato escrito por una gran amiga y escritora, Paquita Escobero. Disfrutadlo.) La tinta estaba esparcida por el escritorio. La carta intacta, como si el negro espesor que salía de la minúscula botella no quisiera tocar esas letras. El líquido hacia un extraño giro en sentido inverso a las agujas del reloj, deslizándose por…